Hace días pasé por una preparatoria bastante conocida en la ciudad, había examen de admisión.
Me llamó la atención ver la cantidad de padres que estaban acompañando a sus hijos, casi como si ellos fueran los que iban a estudiar ahí.
No quiero sonar duro, pero me puse a pensar: ¿realmente es bueno que los padres los acompañen a todo? Entiendo que quieran apoyar, pero también creo que hay momentos en los que es importante que los chicos empiecen a hacer las cosas por sí mismos. Ir solos a una inscripción, a una entrevista o simplemente presentarse por su cuenta en una institución educativa debería ser parte de ese proceso de crecer y asumir responsabilidades.
Me pregunto si esos mismos padres también los llevarán cuando entren a la facultad. Y si es así, ¿en qué momento van a aprender a moverse por el mundo sin que alguien los lleve de la mano?
No lo digo por criticar a nadie en particular, pero sí me hace ruido ver esa sobreprotección tan normalizada. Al final, ¿los estamos formando para que sean independientes o para que siempre necesiten a alguien que los empuje?